domingo, 15 de julio de 2012


Que debería ser y que no debería ser el Frente Cívico

Debería ser un lugar de encuentro entre distintas sensibilidades con un objetivo común en base a diez puntos de partida propuestos por Julio Anguita para debatir y desarrollar.

No debería ser un escaparate de egos que intenten captar adeptos para sus luchas individuales o colectivas.

Debería ser un lugar de encuentro entre personas a titulo individual sin siglas de partidos ni de asociaciones ni de plataformas.

No debería ser una segunda parte de ningún otro movimiento, este en activo o inactivo.

Debería ser un lugar respetuoso con todas las opiniones expresadas por cada uno de sus miembros dado que es de suponer que todos estamos aquí con el animo de construir una realidad diferente.

No debería ser un lugar de confrontación destructiva, el debate de ideas es bueno siempre que se respeten los posicionamientos personales de cada uno de los integrantes del frente.

Debería ser un lugar en el que se respetaran todas las creencias políticas o religiosas de cada uno de los miembros, es un frente creado para aunar a la mayoría que sufre a una minoría aferrada al poder.

No debería ser un medio exclusivamente reivindicativo , para ello existen muchas otras opciones y la mayoría de los miembros del Frente Cívico pertenecen a otras plataformas que ya lo hacen.

Debería ser un lugar de trabajo para desarrollar una alternativa real a la sinrazón que nos quieren imponer. Nuestra función tiene que ser pedagógica e ilusionante, debemos concienciar a la ciudadanía de que con ellos si somos capaces de desarrollar un programa por y para esa mayoría que reivindicamos.

No debería ser un lugar en el que se intentaran imponer nuestras ideas a nivel personal o atendiendo a directrices de otros colectivos, plataformas o partidos políticos. La mayoría es la que tiene que decidir nuestro rumbo.

Deberíamos ser capaces de difundir nuestras propuestas sin caer en la tentación de solapar o sustituir a otros colectivos que defienden intereses similares a los nuestros.

No deberíamos gastar nuestras fuerzas en debates estériles que solo nos llevan a la confrontación.

Deberíamos apoyar cualquier acción que propongan los colectivos que luchan por los mismos intereses que los nuestros.

No deberíamos posicionarnos ni a favor ni en contra de una u otra movilización que coincida en tiempo y lugar con alguna otra que buscan objetivos similares, cada uno de nosotros es libre de asistir o participar en las distintas movilizaciones que proponen los distintos colectivos a los que pertenecemos, si es que pertenecemos a alguno.


El debate queda abierto.




Ángel Herráiz

5 comentarios:

  1. Gran comienzo y declaración. Totalmente de acuerdo.

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  2. Es mas facil decir que respeto todas las creencias, todas las religiones y hasta las manias, que luego convivir con personas que luego se arrodillan ante pastores eclesiasticos besando anillos de oro, mientras piden limosnas para los pobres... Pero desde ahora guardaré estos sentimientos en la intimidad y no volveré a mencionarlos...

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